El Olivar de Dos Almas
En la década de 1930, nuestro olivar se estableció en una tierra que llevaba siglos cultivando olivos. En ese entonces, la cosecha se realizaba de forma manual y con la ayuda de animales, y la extracción del aceite se llevaba a cabo en pequeños molinos de piedra. Cada gota de aceite producida en ese momento encerraba la esencia de la tradición y la dedicación de las generaciones anteriores.